Golf GTI MKII: Stefanie

Os presentamos a Stefanie. Así hemos querido bautizar a nuestro Golf GTI mk2, con el que hemos participado en las pasadas 12h de Cartagena, cita que se celebró este pasado Sábado 1 de Abril de 2017.

Stefanie es, al menos hasta la fecha, nuestro proyecto más ambicioso. Proyecto que empezamos hace ya bastantes meses y que originalmente estaba destinado a participar en las 24h de Ascari. Pero la cita de Cartagena se cruzó en nuestro camino y nos ha encajado bien por fechas, cercanía y precio. Con lo que cambiamos un poco nuestros planes para asistir a la misma, y decidiremos qué hacer sobre las 24h después de esta primera experiencia.

Cómo os adelantábamos hace unos días aquí, completar todo lo necesario para poder disputar una tanda de 12h seguidas está siendo todo un desafío. Desafío que vamos superando con muchos y buenos ratos en el taller, grandes amigos, ayudas externas diversas y muchas más ganas que recursos. Y fruto de todo este esfuerzo, parece que la cosa va tomando forma y que hoy por hoy, Stefanie es una realidad física, tangible, ruidosa y en cierto modo, genial. Aunque no está terminada del todo, a poco días de la carrera tanda cronometrada, seguíamos con diversos detalles por resolver, estas cosas no se terminan nunca…

Stefanie llegó a nuestras manos siendo ya un coche de carreras, cuyo marcador estaba por debajo de los 160.000 km. Su anterior dueño lo usaba para hacer rallies de varios tipos. Así el coche llegó a nosotros ya con barras de seguridad, arneses, suspensión extraña (sí, he dicho extraña), backets, vaciado por dentro, etc. Todo lo demás estaba de serie. Pero no todo eran buenas noticias, este Golf había estado parado bastante tiempo a la intemperie debido a que su anterior dueño ya no corría apenas con el, y todo ese tiempo parado «bajo el cielo» había hecho mella de diversas formas. El Golf presentaba algunos óxidos, varias gomas y plásticos deteriorados, y parecía estar falto de un repaso general. Además, el motor no iba todo lo fino que debería, petardeaba, rateaba… Nada raro, si tenemos en cuenta que este Golf mk2 estaba casi jubilado.

Aun con todo, su dueño nos explicó con bastante detalle la vida de este pequeño, nos trató con educación (algo que escasea cuando buscas un coche de segunda mano entre particulares) y llegamos a un acuerdo para quitarle el trasto de encima, y llevárnoslo puesto para poder darle una segunda juventud, lejos de los Rallies pero no de la competición.

Bien, ya teníamos juguete y trabajo por hacer. Nos pusimos manos a la obra, a ratitos y entre todos se han ido haciendo todas las tareas. Y ha sido está siendo una cantidad de trabajo nada despreciable. La lista de trabajos realizados es muy larga, ahora mismo soy incapaz de recordar todo lo que hemos hecho en estos últimos meses… Cómo resumen rápido podría deciros que el Golf fue desmontado casi por completo, re-acondicionamos todo lo que pudimos (aunque no todo) y se volvió a montar con algunas modificaciones y mejoras menores. La lista de tareas en bruto viene a ser más o menos esta:

1. Swap de motor por un ABF 16v.
2. Cambio de todos los silentblocks por nuevos de poliuretano.
3. Reconstrucción integral de las suspensiones.
4. Instalación de un nuevo circuito de combustible (bomba, mangueras, regulador de presión).
5. Instalación de nuevo radiador de refrigerante sobredimensionado.
6. Instalación de radiador de aceite.
7. Instalación de calefacción de competición.
8. Servicio completo (bombas, poleas, correas, bujías, delco, cables encendido, líquidos, juntas, manguitos, etc)
9. Cambio del emplazamiento de la batería.
10. Reducción de peso.
11. Líquido de freno nuevo y purgado completo.
12. Pastillas de freno nuevas (de calle).
13. Eliminado todo el óxido y saneada la carrocería, chapa, etc.
14. Nueva pintura.
15. Distribución de pesos nueva.
16. Nuevo cuadro de mandos, artesanal a medida.
17. Nuevo mueble central, artesanal a medida.
18. Nueva botonera simplificada, con lo justo para funcionar.
19. Medidor de nivel de combustible.
20. Instalación de extintor manual.
21. Configuración específica tren motriz.

Todas estas tareas, mejoras y cambios hechas con un nivel de «cariño» ciertamente enfermizo. Dedicando tiempo y esfuerzo tanto a documentarse bien antes de cada tarea, como a la ejecución de la tarea en si misma. Ha sido y sigue siendo una experiencia inolvidable. Pensar en las mejoras, comentarlas con el resto de los integrantes del equipo, buscar la posible documentación (que no siempre la hemos encontrado) y leerla con calma, tratando de entender e imaginar cada detalle. Buscar las piezas adecuadas, y finalmente ponerlo todo en su sitio.

Con cada tornillo y tuerca bajo su correspondiente par de apriete, manteniendo siempre en la cabeza la preocupación por el peso final de todo el conjunto… Tras todo este esfuerzo, las horas de risas en el taller, las manos sucias y llenas de cortes, las tensiones puntuales cuando algo nos salía mal. Tras todo el dinero invertido en esta locura, Stafanie por fín apareció.

Y no puedo dejar de pensar que es el mejor resultado posible. Debe ser casi amor de padre. Sinceramente, deben existir cientos de miles de millones de coche mejor preparados, incluso a nivel aficionado. Pero Stefanie es, de alguna forma, nuestra creación. Y para nosotros es la niña más guapa de la guarde, y no es algo discutible (ni racional tampoco).

Terminar a Stefanie, al menos en su primer estado operativo, ha sido toda una experiencia. Sin embargo, por muy bien que lo hayamos pasado haciendo de Stefanie una realidad, lo mejor viene ahora. Ahora toca disfrutar de todo este trabajo en la pista. Seguro que seguiremos retocando, mejorando y reparando allá donde sea necesario, pero lo más duro ya ha pasado y por fin nuestro querido Golf se enfrenta a su nueva vida en los circuitos, donde esperamos que nos de muchas alegrías.

No os perdáis el próximo artículo, donde os contaremos que tal se nos dio en las recientes 12h de Cartagena.

Gracias por leernos y ¡hasta pronto!