12h de Cartagena 2018: Allá que vamos… otra vez.
Pues ya estamos aquí. Tras un largo año de espera, nos adentramos en nuestra segunda experiencia en las tandas de resistencia amateur. Y lo hacemos repitiendo en las 12h de Cartagena. No podíamos faltar a esta nueva cita tras la experiencia del año pasado que nos dejó un sabor agridulce, ya que por un lado fuimos de los más rápidos en pista pero por otro lado no conseguimos terminar las 12h de prueba.
Y lo cierto que esta nueva intentona tampoco empezó cómo esperábamos. En la jornada del Viernes, durante los entrenamientos, nuestro motor perdió por completo la compresión y, basicamente, nos quedamos sin motor. Por suerte, aún quedaban muchas horas hasta el inicio de la prueba, así que ni cortos ni perezosos decidimos cambiar el motor roto por otro.
Teníamos en el taller otra unidad del motor ABF, a unos 300km de donde estábamos. Era la unidad con la que participamos en 2017, nunca terminó de ir fina del todo, pero no teníamos otra alternativa. Así que mientras que dos de nosotros se daban el palizón de ir a por el motor al taller y volver con el mismo, el resto nos pusimos a desmontar la unidad fallida y a preparar todo para instalar el nuevo motor en cuanto llegase.


En cuestión de horas teníamos de nuevo a Stefanie lista para salir a pista. No fue sencillo cambiar el motor en el box, afortunadamente contamos con la ayuda de algunos de los otros equipos, que nos pestaron herramientas y nos echaron una mano con lo más pesado. Con esta ayuda extra y el buen hacer de nuestro mecánico Willy, terminamos todo el trabajo poco antes de las 2 de la madrugada.
Habiendo descansado lo justo, ya el sábado de carrera arrancábamos la mañana con los entrenamientos cronometrados. Si no recuerdo mal, conseguimos el 4º mejor crono en nuestra categoría. Poco importó este crono, pues finalmente salimos desde el pit lane ya que nuestro recien instalado motor se negó a arrancar para salir a formar la parrilla. Lo hizo unos minutos después, cuando ya no estaba permitido ir a la formación.
Partíamos por tanto los últimos, pero el ritmo era bueno y durante las primeras 9 o 10 vueltas pudimos ir rebasando coches hasta colocarnos en la séptima posición de nuestra categoría. Manteniendo ese mismo ritmo, deberíamos llegar a colocarnos cuartos, más o menos, pero ya no tuvimos ocasión de comprobarlo. Justo ahí, en la vuelta 11, empezaron de nuevo los problemas.

Diversos fallos mecánicos se encadenaron uno tras otro. Primero un fallo en el circuito del refrigerante hizo que Stefanie se calentase, lo que nos obligó a detenernos en el box. Algo más tarde, una fuga de anticongelante nos dejaba de nuevo parados. Unas cuantas vueltas después, un manguito del circuito de engrase se rompía, dejando el motor casi sin aceite. Nuevamente detenidos en el box reparamos la fuga mientras el resto de participantes enlazaban una vuelta tras otra… y esa fue la tónica durante gran parte de las 12h que duró la prueba.
Puede sonar descorazonador, pero lo cierto es que lo pasamos muy bien en pista y que al final, conseguimos terminar la prueba. Lo que representa una mejora significativa con respecto al año anterior :-D. Las averías nos obligaron a ir siempre «al ataque» tratando de remontar cada vez que nuestro Golf pisaba lo negro. Nos olvidamos de estrategías, de cuidar las gomas… y nos dedicamos a rodar tan rápido como nos fuera posible una vuelta tras otra. De hecho fuimos el único equipo que no bajó el ritmo una vez llegada la noche. Todo esto nos sirvió para pasárnoslo en grande y para recuperar muchas vueltas perdidas, aun con todo terminamos a unas 30 vueltas de la cabeza.
La victoria en nuestra categoría (categoría 2) se la llevó el equipo TallerBox con un Golf MKII 8v que si bien no fue el más rápido en pista, sí fue el más fiable y constante. Los compañeros de TallerBox nos contaban que con este mismo Golf han participado en varias pruebas de resistencia y nunca jamas les ha dejado tirados. ¡Enhorabuena chicos!

Pero no fueron los únicos en hacerlo muy bien. En la clasificación general, el coche que más vueltas completó durante las 12h fue el BMW 325i E36 del equipo Augusto Carreras. Coche muy bien afinado y a buen seguro pilotos con buenas manos. Era un gustazo verlos pasar por la chicane… particularmente no coincidí nunca en pista con ellos pero me habría encantado al menos poder dar unas vueltas cerca de este 325i. Viendo los cronos que marcaron (mejor vuelta en 2:02’650) no habría durado muchos giros en su estela, pero siempre se aprende algo de rodar con los mejores.
El nuestra categoría el Nissan Sunny 2.0 del equipo PMH Motorsport fue el coche más rápido, tanto en ritmo de carrera cómo a una vuelta. Lástima que no terminaron la prueba por una avería mecánica casi al final.

Tampoco consiguieron terminar los compañeros del equipo Team Lokus con su rapidísimo Renault Clio 1.8, debido a un fallo del alternador a tan sólo 3 horas del final. Una auténtica pena lo de estos chavales de Ibiza con quienes fue un aunténtico placer batallar en pista.
Si todo va según lo previsto, el año que viene volveremos a participar en esta fantástica tanda de resistencia. Toca aprender de nuestros errores, mejorar todo lo posible la fiabilidad de nuestro Golf MK2 16v y volver a intentarlo una una vez más.
Gracias por leernos;